lunes, 10 de septiembre de 2012

Primer reglamento de motociclismo

 Mirar lo que encontrado curioseando por la red el  reglamento de la primera carrera de motociclismo en España

jueves, 6 de septiembre de 2012

AVIA





En 1923 se crea en Carabanchel Alto (M) la compañía Talleres de Jorge Loring, dedicada a la fabricación de material aeronáutico. Unos años después, cambia a Aeronáutica Industrial S.A. (AISA) dedicándose a construir aviones de entrenamiento para el ejército de la República. Durante la Guerra Civil, se trasladó provisionalmente a Alicante. Al acabar la contienda, volvió a Carabanchel y siguió construyendo avionetas con motores de ENMASA. En 1957 crea la sección de motocarros con motor HispanoVilliers.

En 1960 presenta su primer camión ligero: El Avia 2500 con motor Perkins, al que siguió en 1962 el Avia 3500 y en 1964 el microbús Avia. Desde ésta fecha, también se fabrican bajo licencia en Portugal.

La gama se va ampliando con modelos de 1500, 2500, 3500, 4000, 5000, 6500 y 7000 Kg. de carga útil. Además, en 1973 aparece la gama "Mensajero" formada por los 2500 y 3500 con carrocería furgón o combi. Empiezan a mejorarse los autocares, llegando a construirlos de hasta 40 plazas.

A mediados de los setenta, es absorbida por Motor Ibérica  fabricante de los vehículos comerciales Ebro, su principal competidor y gradualmente se fue convirtiendo en una simple segunda marca de Ebro. Cuando Nissan Motors compró Motor Ibérica en los años 80, la marca Avia desapareció.



domingo, 2 de septiembre de 2012

Primer Rally de España


El primer rally que se organizó en España fue el Rally Costa Brava en 1953. El Rally Costa Brava fue una competición de rally  desarrollada en la Costa Brava  desde el año 1953 hasta 1987, y luego nuevamente desde 2005. Ha sido puntuable para el Campeonato de Europa de rally  y el de España. Entre 1988 y 2004 no se celebró, al fusionarse con el Rally Cataluña, pero en 2005 regresó al calendario nacional manteniéndose cuatro años. En la actualidad es puntuable para el campeonato de España de Históricos.



A poco tiempo de su inauguración, se convirtió en una prueba puntuable para el Campeonato de Cataluña de Rallyes. En el año 1957, se convirtió en prueba puntuable para el Campeonato de España de Rallyes  y en 1964, se solicitó que fuese aceptado en el calendario internacional. Después de dos años dentro del calendario internacional, se pensó que fuese puntuable para el Campeonato Europeo de, lo que se consiguió en 1973.


En año 1988, los dos rallyes más importantes de la región, el Rally Costa Brava y el Rally de Cataluña, se fusionaron y pasó a llamarse Rally Cataluña–Costa Brava. Fue el primero de España en incluirse dentro del calendario del Campeonato Mundial de Rally con el nombre de Rally de España, en 1991. Se tuvieron en cuenta las XXIV ediciones disputadas por el Rally Cataluña, en lugar de las XXXV ediciones correspondientes al Rally Costa Brava. Paralelamente, la peña motorista 10 por hora continuó organizando, primero el Rally Costa Brava-Lloret (en 1988), y después el Rally Lloret-Costa Brava (1989–1994).


A partir del 2005, volvió a celebrarse el Rally Costa Brava con la edición número 53 y como pre-inspección del Campeonato de España de Rallyes. Al año siguiente la prueba se incluyó en el calendario del Nacional hasta el año 2009, en el 2010 no sería puntuable para el campeonato nacional.




Costa Brava Histórico
Paralelamente y desde el año 2004, Lloret de Mar celebra también el Rally Costa Brava Històric, con la participación de más de 150 equipos de toda Europa.

Fuente:

Clúa


La empresa Construcciones Metálicas Clúa conocida en los 50  por su motocicletas Clúa (antes MC y CMC) en 1955 acometió el proyecto de fabricar un cochecillo tipo spyder de líneas elegantes, dotado de un motor bicilíndrico de dos tiempos anterior de 247 cc (más tarde se aumentó a 350 y 400 cc) con tracción delantera, cuatro velocidades y marcha atrás, arranque eléctrico, chasis de viga central, suspensión independiente y ruedas de 4,50 x 10.



 Cuando fue presentado en la Feria de Muestra de Barcelona 1957 tuvo un enorme éxito y se realizaron un gran número de pedidos, con el compromiso de que en caso de cualquier defecto o anomalía la empresa devolvería el dinero al comprador. Y el problema apareció, la chapa se desajustaba por un defecto en su fabricación (ajena a Clúa) y la empresa se vio obligada a devolver el dinero a todo el que lo solicitó (que fueron muchos) lo que provocó que en 1960 liquidara las últimas unidades de este coche a 49.300 pesetas y en 1962 la empresa quebró definitivamente. Se fabricaron aproximadamente unas cien unidades en total.

Fuente: